La contribución económica del sector forestal ha disminuido producto de varios factores y lleva a revocatoria de Planes Generales de Manejo.
FUENTE: EL DÍA

Rolf Köhler, director ejecutivo de Autoridad de Fiscalización y Control Social de Bosques y Tierra (ABT), indicó que hay una desmotivación de áreas bajo manejo de bosque porque en la actualidad la crisis del sector forestal ha generado solicitudes de revocatoria de Planes Generales de Manejo (PGM) de forma voluntaria por parte de los usuarios forestales y revocatorios por cambio de propietarios. Este panorama "es producto de dotaciones de tierras por parte del INRA a comunidades campesinas, interculturales e indígenas, las cuales son las de mayor cantidad y esto está produciendo una desmotivación de poner áreas bajo manejo de bosque", expresó. Superficies aprobadas y revocadas. En los años 2016 y 2017 se aprobaron 359.230 hectáreas (ha) de bosques bajo manejo; sin embargo, durante el mismo período se revocaron 155.784 hectáreas de Planes de Manejo de Bosques, quedando para estos dos años solo un incremento real de 203.446 hectáreas (ver cuadro).

Víctor Yucra, director general de Manejo de Bosques y Tierra (ABT) ejemplificó que la ABT antes normalmente aprobaba por encima de las 400.000 hectáreas al año para planes de manejo, sin embargo, en el año 2015 y 2016 se aprobaron 275.635 hectáreas de bosques bajo manejo y durante el mismo período se revocaron 112.202 ha de Planes de Manejo de Bosques. Por su lado, el director ejecutivo explicó que se ha revocado porque la mayoría son propiedades privadas que de acuerdo al plan de uso de suelo, estas personas también pueden tener actividades agrícolas y pecuaria.

"Ellos tienen la potestad de cambiar su actividad económica, en algún momento, pues habían pedido hacer planes generales de manejo pero debido a la fuerte crisis que tiene el sector forestal por la pérdida de mercados internacionales, también por pérdida en el mercado nacional y debido a la excesiva normativa al que fue sometido el sector forestal años atrás fue lo que originó que el sector de la construcción decida importar materiales metálicos para reemplazar a la madera en Bolivia, eso ha originado que los precios se caigan un 20% de lo que valía antes", aseguró y que por esta situación el bosque nativo tropical de Bolivia ha perdido fuerte valor económico. Por eso también, la gente está perdiendo interés en hacer planes generales de manejo forestal y pide cambiar a otra actividad como ser pastura para la actividad pecuaria o puede ser la agricultura para sembrar sorgo, maíz y soya, entre otros. Avance de la frontera forestal y la meta, según el PDES.

En la actualidad se tiene 9,7 millones de hectáreas de bosque bajo manejo y para el 2020 según el Plan de Desarrollo Económico y Social se debe llegar a 13 millones de hectáreas debiéndose alcanzar en los próximos cinco años un ritmo de aprobación de 660.000 nuevas hectáreas por año.

Pero desde la ABT recalcan que esa meta será imposible conseguirla por la crisis que atraviesa el sector forestal debido a las causas ya mencionadas y porque hay una desaceleración de la economía en el mundo, y un cambio tecnológico en lo que se refiere a muebles.

En la mayoría de los países del mundo ya no se está utilizando para muebles la madera proveniente de clima tropical o templado lo que se está utilizando son muebles de melamínico que provienen de bosques implantados, es decir de plantaciones forestales comerciales, estas son principalmente las de pino o eucalipto. Al 2020 el Plan de Desarrollo Económico y Social (PDES) apunta a la revitalización del sector forestal y el incremento económico de su contribución al Estado que implique mayores beneficios para el conjunto de los factores productivos vinculados con los bosques. Las poblaciones locales que aprovechan el bosque de forma comunitaria fortalecen a la vez visión integral del Bosque como la Casa Grande, así como su rol en la provisión de múltiples funciones ambientales económica y socio culturales. Mayor porcentaje de bosque bajo manejo tienen las organizaciones sociales.

Yucra señaló que actualmente el recurso bosque está en manos de las comunidades indígenas (32,52%), campesinas (18.47%) y con una fuerte tendencia a crecer dentro de estos grupos sociales. Otro sector social dinámico en su crecimiento, son las superficies de los propietarios privados (14,47%). Los otros actores forestales son los empresarios privados con Autorizaciones Transitorias Especiales o Ex Concesiones Forestales (28,20%), las Agrupaciones Sociales de Lugar (4,70%) y las Universidades (0,49%). También se debe recalcar que los últimos dos actores, se han estancado en su crecimiento y tienden a decrecer en el futuro (ver gráfico de torta).

Sumando las organizaciones sociales son 55.69% de los bosques bajo manejo. Una propuesta a la nación. Debido a estas situaciones es que la ABT lanzó una propuesta donde plantea que el sector forestal puede generar 2.208 millones (2,2 billones) de dólares anuales para Bolivia, todo esto con 17 millones de hectáreas de bosques nativos para manejo integral maderable y no maderable y 247 mil hectáreas de plantaciones forestales comerciales. Yucra explica que los recursos económicos originados por el sector forestal igualaría a lo generado por el gas actualmente para Bolivia pero a diferencia de este, el sector de bosques nativos bajo manejo y las plantaciones forestales comerciales, son renovables (no se terminan).

El director general de Manejo de Bosques y Tierras explicó que el sector forestal nunca antes había hecho una propuesta para el Plan de desarrollo económico y social del país. Esta institución lo venían trabajando desde hace tres años y en diciembre del 2017 recién se hizo una publicación impresa. "Para viabilizar esta propuesta nos gustaría que el Ministerio de Economía junto con el Ministerio de Planificación, de Desarrollo Productivo, y demás actores se sienten para ver cómo implementarlo o que a partir de este documento se analice cómo generar propuesta más específica ya sea por regiones", dijo. (ver texto de la Estrategia de Revolución Productiva).

Estrategia para implementar la revolución productiva En primer lugar plantean una Zonificación Económica Ecológica (ZEE). Este es el primer paso que se debe realizar para definir las acciones en cualquiera de los sectores productivos, comenzando por el departamento de Santa Cruz que concentra aproximadamente el 60% de la producción agrícola - Ganadera - Forestal en Bolivia. El director general del Manejo de Bosques y Tierra, Víctor Yucra, dijo como país no se puede seguir dando tierras sin saber dónde se ubican. "Como país debemos decir, aquí ubicamos el sector agrícola, acá al pecuario y allá el sector forestal, y así debemos ubicarlo", ejemplificó al pedir la zonificación como primera medida. Por otro lado, piden un aumento de Productividad del sector forestal, debido a que actualmente trabajan con maquinarias demasiadas antiguas y su productividad es baja, hay que incrementar mayor diversidad de especie para aumentar el volumen de metro cúbico de hectáreas.

También piden el acceso a créditos productivos porque el sector forestal nunca ha sido sujeto a crédito; creación de una logística de transporte nacional e internacional; fortalecimiento institucional, exportaciones e importaciones y actualización de las normativas. Potencial del sector forestal Bolivia cuenta con 28,7 millones de hectáreas clasificadas como Tierras de Producción Forestal Permanente (TPFP), destinadas para la producción forestal sostenible, distribuidas en siete de sus nueve departamentos.

En la actualidad 9,7 millones de hectáreas se encuentran en producción bajo manejo forestal sostenible, en las que se aplican y realizan importantes inversiones en medidas de protección al medio ambiente que aseguran la regeneración natural del bosque y su conservación para las futuras generaciones. Los derechos forestales en Bolivia estaban centradas en las Concesiones Forestales (actualmente Autorizaciones Transitorias Especiales- ATE) quienes mantenían derechos de aprovechamiento bajo contrato sobre 22,5 millones de hectáreas. La mayoría de las concesiones estaban en manos de empresas madereras integradas (Bosque bajo manejo- Aserradero- industria), que pagaban al Gobierno por volumen de aprovechamiento.

Luego de promulgada la Ley 1700 se dieron cambios importantes en el sector como la democratización del acceso a los bosques por los distintos usuarios y a partir de la promulgación de la Nueva Constitución Política del Estado (2009) los derechos de los pueblos indígenas originarios campesinos se profundizaron y con ello los beneficios sobre los recursos forestales. De otro lado, los recursos no maderables provenientes de bosques manejados que se están aprovechando comercialmente en la actualidad, generan un movimiento económico anual de aproximadamente 6% del asaí y el cacao. (IBCE 2016)