El gabinete aprobó el decreto 3468 que autoriza el contrato con Eximbank de China con una tasa de interés del 3% y un plazo de 15 años.
FUENTE. PÁGINA SIETE

El gabinete aprobó ayer el Decreto Supremo 3468 que autoriza la firma de un contrato de préstamo de 396 millones de dólares con el banco de exportaciones e importaciones de China (Eximbank) para el desarrollo de la planta siderúrgica del Mutún. “Hemos aprobado el Decreto Supremo 3468, que tiene como finalidad autorizar al Ministerio de Planificación del Desarrollo a suscribir con el Eximbank un crédito preferencial de 396 millones de dólares que financiará el 85% de la ejecución, construcción y puesta en marcha de la planta siderúrgica del Mutún”, informó ayer el ministro de Minería, César Navarro.

El restante 15%, equivalente a unos 70 millones de dólares, será canalizado como contraparte local por el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas. Según Navarro, el crédito con el banco chino tiene una tasa de interés de 3% y un plazo de pago de 15 años y el flujo de caja del proyecto garantiza la devolución del préstamo. “Se cumplió con la ficha ambiental y se garantiza el agua y el gas natural para todo el proyecto y a partir de este decreto tenemos garantizados los recursos para la planta” destacó. De forma paralela se remitirá el decreto a la Asamblea Legislativa para que la norma sea elevada a rango de ley. Navarro confía en que se puedan encarar las obras desde febrero.

En marzo de 2016, la empresa Sinosteel suscribió el contrato con la Empresa Siderúrgica del Mutún (ESM) para que se encargue de la construcción de la factoría en Puerto Suárez. La nueva planta tratará entre 450 mil y 650 mil toneladas de mineral bruto y producirá 250 mil toneladas de hierro esponja, de las que se calcula que 86.000 irán a la exportación. Debe estar lista en 30 meses, pero a los 42 meses tendrá que contar con una producción y comercialización competitiva.

Navarro explicó que en el contrato suscrito con Sinosteel se estableció como condición que la empresa entregará la obra produciendo acero competitivo. Además, una vez iniciado este proceso, la empresa deberá quedarse un año y recién transferir la operación y la comercialización a profesionales bolivianos.

La ESM y la Jindal de India habían firmado en 2007 un contrato de riesgo compartido para explotar el 50% del Mutún. La firma debía invertir 2.100 millones de dólares, de ese valor 600 millones en los dos primeros años, pero el gobierno dijo que incumplió y ejecutó las garantías. La empresa dejó el país e inició un arbitraje internacional.