Divididas están las opiniones frente a las bondades que tendría pasar de mensual a trimestral el reajuste en precios de referencia oficiales de la gasolina y el ACPM, una idea que, de vieja data, le han hecho al Gobierno los transportadores de carga y los distribuidores minoristas de combustibles.
Fuente: El Colombiano ‎‎‎‎

Juan Carlos Rodríguez Muñoz, presidente de la Federación Colombiana de Transportadores de Carga (Colfecar), le dijo a ayer EL COLOMBIANO que el gremio transportador viene impulsando desde tiempo atrás esta iniciativa: “Nos satisface que el Ministerio de Minas considere que es una buena propuesta y analice con el Ministerio de Hacienda su impacto tributario y fiscal”.

El combustible, según dijo, pesa 35 % en los costos totales del transportador de carga. Eso lo convierte en una variable sensible al momento de negociar tarifas con las empresas generadora de carga. Así que preferirían que en lugar de tener un reajuste de 100 pesos en un mes, tuvieran un margen de tres meses para ajustar sus costos operativos.

El dirigente reconoció que la propuesta tiene implicaciones fiscales, pero recordó que los mensajes de austeridad también deben ser acogidos por el productor del combustible, o sea Ecopetrol, y por un Gobierno que no ha transferido a los consumidores colombianos las bajas en los precios internacionales del petróleo: “Eso, tiene qué moderarse”, puntualizó Rodríguez. Esperan señales Para Marcos Tovar, presidente de la Asociación Nacional de Transportadores (ANT), los reajustes trimestrales de los combustibles les darían un mejor margen para negociar las tarifas con clientes y evitaría la gran volatilidad implícita en los movimientos mensuales de los precios de los combustibles.

En su concepto, “al Ministerio de Minas y Energía le resulta muy cómodo hacer los reajustes de los combustibles en el papel, de acuerdo con una fórmula algebraica que no la entienden ni Baldor ni el ministro de Hacienda. Eso es un bicho raro, en que mezclan arvejas con mango y da sopa de arroz”.

La ANT le ha recomendado al Gobierno que en lugar de la variación mensual, se trabaje en un valor ponderado por los tres meses. Su expectativa es que esta semana en el congreso de Colfecar, en Barranquilla, el gobierno Santos dé una respuesta formal a la petición. “Difícil que se implemente” Álvaro Younes Arboleda, presidente de la Federación Colombiana de Distribuidores Minoristas de Combustibles (Fedispetrol), siente que con la propuesta de una alza trimestral se ha arado en medio del desierto en los últimos seis años. Y, según dijo, no le han hecho caso en el Gobierno, “porque hoy el manejo de los precios de la gasolina y el ACPM son más políticos que técnicos” (ver Informe). Unos de los argumentos de Tovar para reclamar el cambio, aunque lo vea poco probable, es que el transporte de carga en Colombia es viable, pero para que sea más productivo es preciso tocar dos variables onerosas: combustibles, que pesan 37 % en costos, y peajes, que explican un 25 %. Por eso, asegura, está guardado mucho camión, “consecuencia de la falta de oferta y de la competencia de movilización de mercancías por río y tren, en lugar de complementar el modo terrestre”.

Mejor, alza mensual: AES Entre tanto, Juan Fernando Prieto Vanegas, presidente de la Asociación de Estaciones de Servicio (AES), considera “poco práctico” que el incremento de los combustibles se haga cada tres meses. Recordó que hasta 1998 la gasolina se reajustaba el primero de enero de cada año y desataba una dura cascada inflacionaria. Hoy, anotó Prieto Vanegas, los reajustes mensuales resultan menos duros para los consumidores, en la medida que se flexibilizan los costos de transporte de mercancías asociadas a la canasta familiar. El dirigente gremial agregó que para el Gobierno siempre será mejor recibir cada mes lo que le toca del precio de los combustibles y no cada tres meses. Ahora el nuevo ministro de Transporte, Germán Cardona Gutiérrez, tendrá oportunidad de sentar posición frente a la propuesta gremial esta semana en el congreso de Colfecar .

ALZAS MENSUALES GENERAN DESCONFIANZA · Álvaro Younes Arboleda, presidente de la Federación Colombiana de Distribuidores Minoristas de Combustibles (Fedispetrol) asegura que, por ejemplo, si hay amenaza de paro en el transporte, el alza de combustibles se detiene, en contraste, como antesala de la venida del Papa, en medio del fragor religioso, se hace el reajuste y no pasa nada. · Agregó la debilidad que en materia de recursos tiene el Gobierno, que se evidencia en que las dos últimas alzas de combustibles las ha hecho, a pesar de que estaban a la baja la cotización del barril de petróleo y de la tasa de cambio con el dólar. . “No tenemos el poder de parar el país, como los transportadores. El problema es que a ellos les están dando mucho caramelo y los van a volver diabéticos. Llevan tres años bregando y no les han solucionado el rubro que más les pega en sus costos operativos, el combustible”.
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