La bancada del Frente Guasu sostiene que el reciente acuerdo firmado para el ordenamiento financiero de Yacyretá significa un grave retroceso para la soberanía energética de nuestro país, no solo porque pretende reconocer una deuda inexistente, sino porque renuncia a la libre disponibilidad de la energía.
Fuente: ABC
   
La posición del Frente Guasu para rechazar el acuerdo se fundamenta en siete puntos que fueron presentados por la ingeniera Mercedes Canese, asesora de la bancada. La especialista explicó en primer lugar que la deuda de Paraguay es cero, porque en el 2014 se cumplieron 40 años del tratado y correspondía la aplicación de lo que establece el Anexo C en su cláusula Revisión, referente a que cualquier deuda legítima pendiente debe pagarse por cada parte proporcionalmente a la cantidad de energía de la que hicieron uso; en este caso, la Argentina hizo uso del 95% de la energía producida.
 
Canese agregó que en el acta firmada tampoco se hace mención a las obras faltantes, ese es el caso del ferrocarril que fue inundado y que es una obra que está establecida en el tratado original. De igual forma el acta suscripta por los presidentes Horacio Cartes y Mauricio Macri ignora un tema fundamental, que es la libre disponibilidad de nuestra energía, que permite al Paraguay su venta a precio de mercado y que le permitiría obtener ingresos extras de unos 750 millones de dólares al año.
 
Por su parte, la presidenta del Frente Guasu, Esperanza Martínez, recordó que la posición histórica de esta agrupación fue la defensa de la soberanía energética.
 
“El tema de Itaipú y Yacyretá ha sido uno de los temas de entrega política y de vergüenza nacional desde décadas”, enfatizó, recordando a los distintos gobiernos que asumieron posiciones genuflexas respecto a la defensa de nuestros intereses nacionales.
 
Agregó que el Frente Guasu no va a acompañar en el Congreso Nacional la aprobación del acta.
 
Asimismo, anunció la realización de una campaña amplia, que será impulsada con distintos sectores sociales y que incluirá no solamente acciones en torno al acta de entendimiento y las negociaciones con Argentina sobre Yacyretá, sino también con miras al 2023, para lo cual prevén una serie de acciones que hacen a la defensa de la soberanía hidroeléctrica contemplando la renegociación con Brasil del acuerdo sobre la Itaipú.