FUENTE: PÁGINA SIETE
Hasta el 30% de los vehículos nuevos importados el año pasado en el país se calcula que ingresaron con un valor subvaluado, de acuerdo con estimaciones del la Cámara Automotor Boliviana (CAB). "El año pasado se importaron cerca de 46.000 vehículos nuevos al país, de éstos hasta un 30% fueron "grises” (ingresaron al país subfacturados o subvaluados)”, explicó ayer Luis Orlando Encinas, gerente de la CAB. El ejecutivo de esta institución indicó que éste es un serio problema y recomendó al público no comprar vehículos de agencias o dealers no autorizados, porque los importadores que incurren en esta modalidad traspasan su responsabilidad al comprador, ya que realizan todos los trámites en su nombre. "Los compradores de estos vehículos se ponen en un riesgo innecesario ya que, en muchos casos, los vendedores actúan desde empresas fantasma y de realizarse una fiscalización hasta 10 años después el único nombre que aparecerá en los papeles será el de la persona que compró el vehículo”, advirtió.
El pasado martes, la CAB denunció que Bolivia pierde entre 80 y 100 millones de dólares por año en ingresos fiscales por la internación de vehículos con un valor subfacturado o subvaluado desde territorio chileno. Esta modalidad de compra de vehículos consiste en conseguir los motorizados con dealers autorizados en Medio Oriente o Estados Unidos, donde pueden conseguir mejores precios que los ofrecidos en el país Posteriormente, mediante una negociación, consiguen que el vendedor les consigne una factura o comprobante por un valor inferior por el vehículo, que llega a la Zona Franca de Iquique en Chile y a territorio nacional. "Con ese coche que en papeles cuesta mucho menos de su valor real, se le da factura comercial por ese valor con el que ingresa a la Zona Franca de Iquique”, precisó. De esa manera la factura de reexpedición a Bolivia se realiza con ese valor y es sobre esa base que en Bolivia la Aduana realiza la liquidación de impuestos a este importador de vehículos.
Estos autos por lo general son ofertados en autoventas o se traen en forma directa al comprador vía agencias despachantes de Aduanas, previo pago del 50% del valor del coche, dijo. Subfacturación Ingresos La subfacturación de los vehículos que salen de Iquique hacia el país afecta los ingresos fiscales tanto de Bolivia como de Chile, opinó el abogado chileno Pedro Véliz. Explicó que en el caso boliviano la presentación de facturas con un valor irreal afecta al Estado porque éste recibe menores ingresos por la importación. En Chile reduce la base imponible a las empresas que operan en la zona franca.
Hasta el 30% de los vehículos nuevos importados el año pasado en el país se calcula que ingresaron con un valor subvaluado, de acuerdo con estimaciones del la Cámara Automotor Boliviana (CAB). "El año pasado se importaron cerca de 46.000 vehículos nuevos al país, de éstos hasta un 30% fueron "grises” (ingresaron al país subfacturados o subvaluados)”, explicó ayer Luis Orlando Encinas, gerente de la CAB. El ejecutivo de esta institución indicó que éste es un serio problema y recomendó al público no comprar vehículos de agencias o dealers no autorizados, porque los importadores que incurren en esta modalidad traspasan su responsabilidad al comprador, ya que realizan todos los trámites en su nombre. "Los compradores de estos vehículos se ponen en un riesgo innecesario ya que, en muchos casos, los vendedores actúan desde empresas fantasma y de realizarse una fiscalización hasta 10 años después el único nombre que aparecerá en los papeles será el de la persona que compró el vehículo”, advirtió.
El pasado martes, la CAB denunció que Bolivia pierde entre 80 y 100 millones de dólares por año en ingresos fiscales por la internación de vehículos con un valor subfacturado o subvaluado desde territorio chileno. Esta modalidad de compra de vehículos consiste en conseguir los motorizados con dealers autorizados en Medio Oriente o Estados Unidos, donde pueden conseguir mejores precios que los ofrecidos en el país Posteriormente, mediante una negociación, consiguen que el vendedor les consigne una factura o comprobante por un valor inferior por el vehículo, que llega a la Zona Franca de Iquique en Chile y a territorio nacional. "Con ese coche que en papeles cuesta mucho menos de su valor real, se le da factura comercial por ese valor con el que ingresa a la Zona Franca de Iquique”, precisó. De esa manera la factura de reexpedición a Bolivia se realiza con ese valor y es sobre esa base que en Bolivia la Aduana realiza la liquidación de impuestos a este importador de vehículos.
Estos autos por lo general son ofertados en autoventas o se traen en forma directa al comprador vía agencias despachantes de Aduanas, previo pago del 50% del valor del coche, dijo. Subfacturación Ingresos La subfacturación de los vehículos que salen de Iquique hacia el país afecta los ingresos fiscales tanto de Bolivia como de Chile, opinó el abogado chileno Pedro Véliz. Explicó que en el caso boliviano la presentación de facturas con un valor irreal afecta al Estado porque éste recibe menores ingresos por la importación. En Chile reduce la base imponible a las empresas que operan en la zona franca.