Nadie está 100% a salvo. El cáncer es una de las enfermedades que más muertes causa en los últimos años y aunque los detonantes de la enfermedad no siempre son claros, la Organización Mundial de la Salud (OMS), en su Informe Mundial del Cáncer 2014, alerta que hay cuatro principales ‘culpables’ que están provocando alrededor de un tercio de las muertes por cáncer en el mundo. Y esos cuatro factores son evitables.
El tabaco, el alcohol, la obesidad y llevar una vida sedentaria, son los detonantes más habituales de varios tumores cancerígenos.
En diferentes oportunidades, el mayor organismo de salud a nivel mundial publicó informes que vinculan la obesidad (específicamente las carnes rojas, las bebidas azucaradas y el consumo habitual y excesivo de alcohol) con el desarrollo de varios tipos de cáncer.
Por esa vía, la agencia de la ONU también confirma que las dietas bajas en calorías y una vida activa, que incluya al menos 90 minutos de ejercicio diario, disminuyen el riesgo de desarrollar cáncer y otras enfermedades cardiovasculares.
Tabaco, el peor de todos.
El consumo de tabaco es el factor de riesgo más importante y es la causa de más del 20% de las muertes mundiales por cáncer en general, y alrededor del 70% de las muertes por cáncer de pulmón, señala la OMS.
El organismo asegura que más del 30% de las muertes por esta enfermedad podrían evitarse siguiendo cuatro reglas básicas: comer poco, moverse, no fumar y beber con moderación.

