Fuente: El Colombiano
Lucio Rubio, director para Colombia de la multinacional Enel, manifestó que los proyectos afrontan retos que se convierten en dificultades sociales, ambientales, de licenciamiento, legales e institucionales. “Hay un modelo de licenciamiento que ha avanzado, pero aún debe ajustarse a la realidad de los proyectos”.
Igualmente, propuso una labor integral por parte de los ministerios de Ambiente, Minas y Energía, Interior y Agricultura: que actúen como cuerpo colegiado que ofrezca acompañamiento permanente en redefinir el modelo de otorgamiento de licencias.
Por su parte, Wilson Chinchilla, vicepresidente de Proyectos e Ingeniería de EPM, comentó que los problemas observados en el desarrollo del proyecto Nueva Esperanza (subestación eléctrica y unos 200 kilómetros de líneas) impacta la competitividad del país, en mayores costos y tiempos de ejecución, riesgo de racionamiento, necesidad de obras de mitigación y mayores costos para el usuario.
Finalmente, Luis Alejandro Camargo, gerente de Intercolombia, atribuyó a la problemática en la ejecución de los proyectos, que la infraestructura eléctrica nacional no haya crecido al ritmo adecuado para cumplir con estándares de calidad y seguridad.
Señaló que construir hoy proyectos implica suministro de información cualificada y oportuna, otorgamiento de licencias ambientales, aspectos prediales, relacionamiento con comunidades y coordinación entre las autoridades.