FUENTE: JORNADA
Morales firmó la reforma de la Ley de Cooperativas en un acto en la ciudad de Cochabamba (centro) al que asistió como una muestra de apoyo el líder de la Central Obrera Boliviana (COB), el minero Guido Mitma, quien proviene de los sindicatos de las minas estatales. En su discurso, el mandatario destacó su reconciliación con la COB y la importancia de la reforma aprobada por la necesidad de la organización de sindicatos para defender a los trabajadores. "No podemos volver a tiempos de la colonia, no podemos volver al pasado porque en aquellos tiempos, en tiempos de la monarquía, las organizaciones estaban condenadas al exterminio, no tenían derecho a organizarse.
Ahora estamos en otros tiempos", afirmó. Mitma resaltó la norma que permite crear sindicatos en las cooperativas y aseguró que es una medida de apoyo a los derechos laborales reconocidos en la Constitución vigente desde 2009. Agregó que ningún sector, como el de las cooperativas mineras, puede "definir la suerte" de los trabajadores afiliados a la COB. "Por eso se ha exigido esta ley de modificación para que se garantice la libre sindicalización. Así podemos garantizar la estabilidad laboral y familiar", afirmó el dirigente minero.
Entre junio y julio, la COB se enfrentó a Morales con diversas protestas para rechazar el despido de cerca de un millar de trabajadores de la empresa de textiles Enatex, que ha quebrado. La aprobación de la reforma fue criticada por el presidente de la Federación Nacional de Cooperativas Mineras (Fencomin), Carlos Mamani, quien la consideró una "provocación" y una declaración de "guerra" de parte del Gobierno, que antes era su aliado. Acusados de causar lesiones graves a policías que intentaban desbloquear las carreteras, diez mineros fueron encarcelados hace una semana, lo que ocasionó que se suspendiera el diálogo que habían iniciado las autoridades y los líderes de las cooperativas mineras.
El Gobierno ha explicado que la reforma no alcanza a las cooperativas mineras, pero los dirigentes de ese sector consideran que la norma finalmente será perjudicial para su funcionamiento. El Ejecutivo acusa a las cooperativas de generar el conflicto con la intención de negociar nuevos beneficios como la autorización para firmar contratos con privados sobre yacimientos estatales.
A diferencia de las cooperativas de otras áreas, las mineras funcionan internamente con grupos minoritarios de patrones y decenas de miles de trabajadores subcontratados en condiciones de explotación, según investigaciones realizadas en el sector. Tras la aprobación de la reforma, los mineros de ese sector anunciaron que desde el lunes retomarán sus movilizaciones, a las que se sumarán otros afiliados a la Confederación Nacional de Cooperativas de Bolivia (Concobol), que incluye a los sectores de servicios en electricidad y aguas. El presidente de Concobol, Albino García, amenazó con el bloqueo de carreteras, manifestaciones y la ocupación de oficinas del Estado.
Morales firmó la reforma de la Ley de Cooperativas en un acto en la ciudad de Cochabamba (centro) al que asistió como una muestra de apoyo el líder de la Central Obrera Boliviana (COB), el minero Guido Mitma, quien proviene de los sindicatos de las minas estatales. En su discurso, el mandatario destacó su reconciliación con la COB y la importancia de la reforma aprobada por la necesidad de la organización de sindicatos para defender a los trabajadores. "No podemos volver a tiempos de la colonia, no podemos volver al pasado porque en aquellos tiempos, en tiempos de la monarquía, las organizaciones estaban condenadas al exterminio, no tenían derecho a organizarse.
Ahora estamos en otros tiempos", afirmó. Mitma resaltó la norma que permite crear sindicatos en las cooperativas y aseguró que es una medida de apoyo a los derechos laborales reconocidos en la Constitución vigente desde 2009. Agregó que ningún sector, como el de las cooperativas mineras, puede "definir la suerte" de los trabajadores afiliados a la COB. "Por eso se ha exigido esta ley de modificación para que se garantice la libre sindicalización. Así podemos garantizar la estabilidad laboral y familiar", afirmó el dirigente minero.
Entre junio y julio, la COB se enfrentó a Morales con diversas protestas para rechazar el despido de cerca de un millar de trabajadores de la empresa de textiles Enatex, que ha quebrado. La aprobación de la reforma fue criticada por el presidente de la Federación Nacional de Cooperativas Mineras (Fencomin), Carlos Mamani, quien la consideró una "provocación" y una declaración de "guerra" de parte del Gobierno, que antes era su aliado. Acusados de causar lesiones graves a policías que intentaban desbloquear las carreteras, diez mineros fueron encarcelados hace una semana, lo que ocasionó que se suspendiera el diálogo que habían iniciado las autoridades y los líderes de las cooperativas mineras.
El Gobierno ha explicado que la reforma no alcanza a las cooperativas mineras, pero los dirigentes de ese sector consideran que la norma finalmente será perjudicial para su funcionamiento. El Ejecutivo acusa a las cooperativas de generar el conflicto con la intención de negociar nuevos beneficios como la autorización para firmar contratos con privados sobre yacimientos estatales.
A diferencia de las cooperativas de otras áreas, las mineras funcionan internamente con grupos minoritarios de patrones y decenas de miles de trabajadores subcontratados en condiciones de explotación, según investigaciones realizadas en el sector. Tras la aprobación de la reforma, los mineros de ese sector anunciaron que desde el lunes retomarán sus movilizaciones, a las que se sumarán otros afiliados a la Confederación Nacional de Cooperativas de Bolivia (Concobol), que incluye a los sectores de servicios en electricidad y aguas. El presidente de Concobol, Albino García, amenazó con el bloqueo de carreteras, manifestaciones y la ocupación de oficinas del Estado.