El congelamiento de tarifas en la época kirchnerista incentivó el consumo y desalentó la llegada de capitales para un sector que hoy debe comprar afuera un tercio de lo que se consume en el país.
LA NACIÓN

Argentina consume 150 millones de metros cúbicos de gas por día y produce 100 millones de metros cúbicos diarios. Estas cifras son una clara muestra de lo que sucede en el sector gasífero en el país: un tercio de lo que se consume debe ser importado. Pero antes de llegar a esta situación hubo causas que propiciaron la debacle energética, como la política kirchnerista que congeló las tarifas y que, por lo tanto, no dio señales de precios para que llegaran inversiones productivas. Así, el actual gobierno intentó sincerar en parte las tarifas, pero se encontró con la queja de consumidores que veían incrementada su factura hasta en un 1000%. Muchos fueron a la Justicia y lograron un fallo a su favor, con lo que la actual administración debió sacar una solución de emergencia: puso un tope de 400% a los aumentos.

Lea la noticia>