FUENTE: JORNADA
El acuerdo formó parte de un convenio marco suscrito entre las dos empresas durante el desarrollo del Foro Económico Internacional de San Petersburgo 2016, en Rusia, según indica un comunicado de YPFB, y fue suscrito por el presidente de la firma boliviana, Guillermo Acha, y el representante legal de GP Exploración y Producción, Andrey Stepanovich Fick. Las zonas tradicionales de extracción que se evaluarán son las de Vitiacua, entre los departamentos de Santa Cruz (este) y Chuquisaca (centro-sur) y con una extensión de 73.875 hectáreas, y La Ceiba, ubicada en Tarija (sur) y con 47.500 hectáreas de extensión. Además, se evaluará el potencial en la zona no tradicional del Madidi, que ocupa 690.000 hectáreas en el departamento de La Paz (oeste). El Madidi es un parque nacional protegido que cuenta con una importante biodiversidad vegetal y animal.
El Gobierno boliviano abrió el año pasado mediante un decreto la posibilidad de explorar y explotar hidrocarburos en sus áreas naturales protegidas, lo que provocó un fuerte rechazo de organizaciones ecologistas y grupos indígenas, que acusaron al presidente Evo Morales de tener una doble moral en cuanto al conservacionismo. Este acuerdo entre YPFB y Gazprom sigue a un Plan de Acción suscrito por las dos petroleras y el Ministerio boliviano de Hidrocarburos y Energía en febrero pasado. Dicho plan prevé, según la nota de YPFB, "la aplicación de acuerdos de cooperación entre los cuales se encuentra la búsqueda conjunta de nuevos proyectos en el campo de la exploración, producción y transporte de hidrocarburos (...)". Los acuerdos, agrega el comunicado, se enmarcan en las medidas que la estatal boliviana impulsa en el área "prioritaria" de la exploración "bajo la nueva normativa de la Ley de Promoción a las Inversiones en Exploración y Explotación Hidrocarburífera".
La venta de gas a los mercados vecinos de Brasil y Argentina es el pilar de la economía boliviana, que se ha visto afectada por la caída internacional de los precios del petróleo, a los que está indexado el gas que exporta Bolivia. El Gobierno boliviano, que nacionalizó el sector en el 2006 tras la llegada al poder de Evo Morales, ha impulsado en los últimos tiempos una agresiva política de exploración con el fin de hallar nuevos yacimientos hidrocarburíferos. La última certificación de reservas probadas en Bolivia, difundida en 2014, estableció que el país tenía 10,45 millones de pies cúbicos de gas natural y 211,45 millones de barriles de crudo.
El acuerdo formó parte de un convenio marco suscrito entre las dos empresas durante el desarrollo del Foro Económico Internacional de San Petersburgo 2016, en Rusia, según indica un comunicado de YPFB, y fue suscrito por el presidente de la firma boliviana, Guillermo Acha, y el representante legal de GP Exploración y Producción, Andrey Stepanovich Fick. Las zonas tradicionales de extracción que se evaluarán son las de Vitiacua, entre los departamentos de Santa Cruz (este) y Chuquisaca (centro-sur) y con una extensión de 73.875 hectáreas, y La Ceiba, ubicada en Tarija (sur) y con 47.500 hectáreas de extensión. Además, se evaluará el potencial en la zona no tradicional del Madidi, que ocupa 690.000 hectáreas en el departamento de La Paz (oeste). El Madidi es un parque nacional protegido que cuenta con una importante biodiversidad vegetal y animal.
El Gobierno boliviano abrió el año pasado mediante un decreto la posibilidad de explorar y explotar hidrocarburos en sus áreas naturales protegidas, lo que provocó un fuerte rechazo de organizaciones ecologistas y grupos indígenas, que acusaron al presidente Evo Morales de tener una doble moral en cuanto al conservacionismo. Este acuerdo entre YPFB y Gazprom sigue a un Plan de Acción suscrito por las dos petroleras y el Ministerio boliviano de Hidrocarburos y Energía en febrero pasado. Dicho plan prevé, según la nota de YPFB, "la aplicación de acuerdos de cooperación entre los cuales se encuentra la búsqueda conjunta de nuevos proyectos en el campo de la exploración, producción y transporte de hidrocarburos (...)". Los acuerdos, agrega el comunicado, se enmarcan en las medidas que la estatal boliviana impulsa en el área "prioritaria" de la exploración "bajo la nueva normativa de la Ley de Promoción a las Inversiones en Exploración y Explotación Hidrocarburífera".
La venta de gas a los mercados vecinos de Brasil y Argentina es el pilar de la economía boliviana, que se ha visto afectada por la caída internacional de los precios del petróleo, a los que está indexado el gas que exporta Bolivia. El Gobierno boliviano, que nacionalizó el sector en el 2006 tras la llegada al poder de Evo Morales, ha impulsado en los últimos tiempos una agresiva política de exploración con el fin de hallar nuevos yacimientos hidrocarburíferos. La última certificación de reservas probadas en Bolivia, difundida en 2014, estableció que el país tenía 10,45 millones de pies cúbicos de gas natural y 211,45 millones de barriles de crudo.