FUENTE: EL DEBER
El Gobierno no pudo, anoche, evitar la suspensión de las movilizaciones del sector fabril, que exige dejar sin efecto el decreto supremo 2765 que desvincula a 850 empleados de la estatal Empresa Nacional Textil (Enatex).
Luego de una reunión en Palacio de Gobierno, convocada por el presidente en ejercicio, Álvaro García Linera, que empezó a las 17:00 y se prolongó hasta la 22:45, los trabajadores, a la cabeza de la Central Obrera Boliviana (COB), decidieron continuar con las movilizaciones en La Paz, llevar a cabo el ampliado nacional previsto para hoy y mantener firme la amenaza de impedir la entrada folclórica del Gran Poder, mientras esperan que el Gobierno les dé una respuesta. En la cita convocada por Álvaro García Linera se fijó un cuarto intermedio hasta este fin de semana y se espera que se defina la reincorporación o no de los trabajadores.
Según el ejecutivo máximo nacional de la dirigencia cobista, Guido Mitma, el sector obrero culpa de la baja productividad y rentabilidad de Enatex a la planta administrativa de la empresa pública. Marchas violentas A la reunión se antecede una movilización violenta el miércoles, donde la Policía gasificó la marcha luego de que los trabajadores intentaran tomar la planta de Enatex y se tuvo que lamentar la explosión de un cachorro de dinamita que voló la mano izquierda de Luis Coarite (59). Ese día, se aprehendió a 76 fabriles.
Fueron liberados. Ayer, el sector fabril nuevamente salió a las calles, en apoyo a los trabajadores, aunque no se registró desorden. Para hoy se prevé una nueva marcha en la sede de Gobierno y un ampliado nacional que definirán medidas a tomar. Los movilizados mantienen la amenaza de bloquear la entrada folclórica del Gran Poder, que se realizará mañana. Debido a la reunión con los fabriles, el presidente en ejercicio, Álvaro García Linera, canceló su asistencia al acto de inauguración de la Exponorte, en Montero
El Gobierno no pudo, anoche, evitar la suspensión de las movilizaciones del sector fabril, que exige dejar sin efecto el decreto supremo 2765 que desvincula a 850 empleados de la estatal Empresa Nacional Textil (Enatex).
Luego de una reunión en Palacio de Gobierno, convocada por el presidente en ejercicio, Álvaro García Linera, que empezó a las 17:00 y se prolongó hasta la 22:45, los trabajadores, a la cabeza de la Central Obrera Boliviana (COB), decidieron continuar con las movilizaciones en La Paz, llevar a cabo el ampliado nacional previsto para hoy y mantener firme la amenaza de impedir la entrada folclórica del Gran Poder, mientras esperan que el Gobierno les dé una respuesta. En la cita convocada por Álvaro García Linera se fijó un cuarto intermedio hasta este fin de semana y se espera que se defina la reincorporación o no de los trabajadores.
Según el ejecutivo máximo nacional de la dirigencia cobista, Guido Mitma, el sector obrero culpa de la baja productividad y rentabilidad de Enatex a la planta administrativa de la empresa pública. Marchas violentas A la reunión se antecede una movilización violenta el miércoles, donde la Policía gasificó la marcha luego de que los trabajadores intentaran tomar la planta de Enatex y se tuvo que lamentar la explosión de un cachorro de dinamita que voló la mano izquierda de Luis Coarite (59). Ese día, se aprehendió a 76 fabriles.
Fueron liberados. Ayer, el sector fabril nuevamente salió a las calles, en apoyo a los trabajadores, aunque no se registró desorden. Para hoy se prevé una nueva marcha en la sede de Gobierno y un ampliado nacional que definirán medidas a tomar. Los movilizados mantienen la amenaza de bloquear la entrada folclórica del Gran Poder, que se realizará mañana. Debido a la reunión con los fabriles, el presidente en ejercicio, Álvaro García Linera, canceló su asistencia al acto de inauguración de la Exponorte, en Montero