Fuente: LA PRENSA
En su informe “Perspectivas de América Latina 2016: hacia una nueva asociación con China”, la CAF analiza cómo América Latina debería mejorar y profundizar su asociación con China como parte de su agenda de desarrollo, bajo la consideración de que el país asiático fue y será un elemento de cambio real para la región.
“El gran interés chino por las industrias extractivas exige reforzar los mecanismos de evaluación y control; mejorar la capacidad de los ministerios para hacer respetar las normas y la legislación en los proyectos extractivos”, recomienda el documento.
El informe plantea a los países de la región establecer un claro proceso de consulta para dar respuesta a los problemas locales que puedan surgir, incluido el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT); colaborar con las organizaciones civiles y el Gobierno chino para que los inversores interesados en las industrias extractivas rindan cuentas del cumplimiento de las directrices medioambientales del país.
El éxito de la alianza entre China y América Latina requiere una gobernanza multilateral adecuada, dice el informe de la CAF. “Para ello China necesita comprender los retos de desarrollo a los que se enfrenta América Latina. Los canales de cooperación deben ir más allá de simples plataformas bilaterales e incluir un diálogo estructurado con la región en su conjunto. Para complementar la agenda actual, esta asociación debe incluir objetivos de sostenibilidad y de regulación como principales elementos de cooperación”, reafirma el documento. El informe también señala que el comercio entre China y América Latina experimentó una expansión sin precedentes durante los últimos 15 años, pero el modelo de crecimiento basado en las materias primas está demostrando sus límites.
En su informe “Perspectivas de América Latina 2016: hacia una nueva asociación con China”, la CAF analiza cómo América Latina debería mejorar y profundizar su asociación con China como parte de su agenda de desarrollo, bajo la consideración de que el país asiático fue y será un elemento de cambio real para la región.
“El gran interés chino por las industrias extractivas exige reforzar los mecanismos de evaluación y control; mejorar la capacidad de los ministerios para hacer respetar las normas y la legislación en los proyectos extractivos”, recomienda el documento.
El informe plantea a los países de la región establecer un claro proceso de consulta para dar respuesta a los problemas locales que puedan surgir, incluido el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT); colaborar con las organizaciones civiles y el Gobierno chino para que los inversores interesados en las industrias extractivas rindan cuentas del cumplimiento de las directrices medioambientales del país.
El éxito de la alianza entre China y América Latina requiere una gobernanza multilateral adecuada, dice el informe de la CAF. “Para ello China necesita comprender los retos de desarrollo a los que se enfrenta América Latina. Los canales de cooperación deben ir más allá de simples plataformas bilaterales e incluir un diálogo estructurado con la región en su conjunto. Para complementar la agenda actual, esta asociación debe incluir objetivos de sostenibilidad y de regulación como principales elementos de cooperación”, reafirma el documento. El informe también señala que el comercio entre China y América Latina experimentó una expansión sin precedentes durante los últimos 15 años, pero el modelo de crecimiento basado en las materias primas está demostrando sus límites.