Bolivia y Venezuela se encuentran en el fondo en el Ranking de Competitividad de América Latina, elaborado por la Escuela de Negocios Aden, el documento resalta el avance de Colombia y Perú, baja ubicación a Brasil, que vive un clima político adverso.
EL DIARIO
El Ranking de Competitividad de América Latina, elaborado por la Escuela de Negocios Aden, informa que Chile continúa manteniendo el liderazgo, aunque desde 2013 su puntaje y la diferencia sobre el resto del grupo se ha reducido. Costa Rica por primera vez ha conseguido desplazar de la segunda posición a Panamá, aunque por escaso margen. A continuación se sitúa Uruguay, en cuarto lugar a muy poca distancia de los anteriores, informa Portafolio de Colombia.
En la zona media México, Colombia, Brasil y Perú muestran escasas diferencias entre sí. Este grupo homogéneo no existía en las estimaciones de 2012 y 2013, pero el ascenso de Colombia y Perú y el descenso de Brasil (antes cercano a Costa Rica y Uruguay) han permitido una situación de países con nivel competitivo aceptable y avances similares en infraestructura, aspectos institucionales y, en menor medida, estabilidad macroeconómica, agrega.
Les siguen Argentina, Ecuador y El Salvador, separados por escaso puntaje. En el grupo siguiente aparecen países que observan algunos retrasos competitivos marcados (cada uno en grado diverso y con dinámicas diferentes) derivados de problemas de inseguridad, inestabilidad macroeconómica, aspectos institucionales e infraestructura. Ellos son República Dominicana, Paraguay, Honduras, Guatemala y Nicaragua. En el fondo de la tabla están Bolivia y Venezuela.
El estudio analiza la economía de 18 países de América Latina (Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela) y que representan el 99% del PIB de la región.
Se estudian diez aspectos: cobertura de necesidades básicas, aspectos institucionales, infraestructura, estabilidad macroeconómica, salud, educación, expectativas de población, competencia en los mercados, eficiencia en las relaciones laborales y el acceso a la tecnología.
El ‘top′ se construye con base en datos de fuentes internacionales como el Banco Mundial, el BID, la Cepal, la ONU, Unicef, la OIT, la Organización Mundial del Comercio, la OMS y OPS, entre otras, así como de información de entidades oficiales y privadas en cada país. Se publica desde 2010.