La demanda de petróleo es mayormente impulsada por el transporte. Si uno obtiene crecimiento en gas natural, e-movilidad y biocombustibles, quiere asegurarse como empresa que tiene infraestructura que se puede usar y también monetizar en el futuro. Querrá tener estaciones de aprovisionamiento que ofrezcan diferentes combustibles.
REVISTA PETRÓLEO & GAS

Entrevista con Christoph Frei, Secretario General del Consejo Mundial de la Energía


“El mensaje clave de Paris es que debemos ser parte de la frontera de la innovación”


“El largo camino desde Paris es construir con la mejor tecnología y desarrollar e implementar con innovación. Si no nos encontramos a la cabeza de todo esto, podríamos estar ausentes en el futuro”, analiza. Frei (47), quien es el líder del Consejo desde 2009, brinda detalles de lo que significa el acuerdo de ‘Paris’ para el sector de servicios públicos, empresas de petróleo y gas, empresas de carbón e inversores. Observa que el mundo atraviesa una triple transición: una transición de descarbonización, una transición de diseño de mercado y una transición en la capacidad de recuperación. Para navegar por estas transiciones, “tienes que estar muy seguro de cuáles son tus prioridades”, dice.
 
Se pregunta ¿nos da Paris una señal suficientemente clara para que las empresas de energía y los inversionistas se coloquen en un nuevo curso para el futuro? Después de todo, esto es todo lo que el sector energético ha estado pidiendo mayormente de quienes aprueban las políticas: un alto a la incertidumbre, políticas predecibles, estructuras de regulación equilibradas. De acuerdo a Christoph Frei, quien ha trabajado sin pausa para unir al sector energético global con una visión hacia un futuro sostenible, la respuesta es un rotundo sí.
 
“Paris ha indicado de manera absolutamente clara que debemos iniciar la marcha hacia la descarbonización. Es cierto, no tenemos un precio internacional para el carbón, lo que sería la mejor solución para el sector energético. Pero tenemos el precio sombra: sabemos que la implementación de los INDC’s (planes nacionales sobre el clima) reducirá las emisiones de 59 GT a 55 GT para 2030. Esa puede ser la segunda mejor solución, pero contribuye con un aspecto de claridad. Y sabemos que es solo el comienzo. Es solo la tercera parte del camino. Los planes serán revisados y las ambiciones serán elevadas al máximo para llegar a las metas”.
 
Frei dice que el resultado de Paris excede las expectativas. “Hace un año, esperábamos tener 100 países en la cumbre, finalmente obtuvimos 185 países firmas. Sí, existen brechas que debemos cerrar, como la brecha de la ambición, una brecha de financiamiento por supuesto”. Añadió que Paris no conduciría a un precio claro para el carbón. “Eso no estaba en la agenda”, enfatiza.
 
Si usted fuera un CEO de una gran empresa de energía, ¿qué haría ahora?
 
Tiene que incluir ahí otra pieza que es muy importante: la innovación. Los INDCs (planes nacionales sobre el clima) son un compromiso para promover renovables y cleantech (tecnología limpia). Tiene que combinar eso con la historia de innovación. Veinte países están duplicando su presupuesto para RD&D (Investigación Desarrollo y Demostración) de los próximos cinco años. Los líderes de la industria han anunciado un impulso a la innovación tipo Manhattan. Si uno no está a la cabeza de ello como empresa de energía, uno va a perder. Puede ser que no haya un acuerdo vinculante para exigir que se hagan las cosas, pero si uno no es parte de la frontera de la innovación, podría no estar presente en el futuro cercano. Ese es el mayor resultado de Paris. Es una enorme presión pero también una formidable oportunidad.
 
Sabemos que ahora existe un presupuesto de carbono que limitará el crecimiento de los combustibles fósiles. ¿Cómo deberían enfrentar este hecho las empresas activas en combustibles fósiles?

Bueno, un cierto número de empresas como Eon y RWE, ya han decidido separarse de sus actividades con combustibles fósiles. Si uno viene de un contexto tradicional, y tiene que trasladarse a un nuevo entorno, con diferentes tipos de inversionistas, diferentes marcos de tiempo, que tratan directamente con hogares, se requiere diferentes destrezas. Como resultado también necesitaremos un sistema central. Necesitaremos gas en muchas economías por mucho tiempo. También necesitamos las destrezas, los inversionistas, las políticas normativas, para lograr este sistema central. 

“No podríamos apoyar la lógica de que la industria del carbón es necesaria para que los pobres tengan acceso a la energía”.

Las empresas de servicios públicos pueden ser capaces de dividirse, pero ¿qué pasa con las empresas de petróleo y gas?

La demanda de petróleo es mayormente impulsada por el transporte. Si uno obtiene crecimiento en gas natural, e-movilidad y biocombustibles, quiere asegurarse como empresa que tiene infraestructura que se puede usar y también monetizar en el futuro. Querrá tener estaciones de aprovisionamiento que ofrezcan diferentes combustibles.

Respecto al suministro, muchas empresas petroleras internacionales están cambiando de petróleo a gas pero también invierten en energía renovable. Espero importantes anuncios respecto a este tema. En el upstream, se deben hacer algunas preguntas serias. La OPEC se ha manejado durante mucho tiempo por la lógica de Hotelling, que dice que a medida que la disponibilidad de un recurso finito se reduce con el tiempo, su valor marginal subirá, (el nombre se debe a una teoría del economista estadounidense Harold Hotelling). Todo el debate sobre el carbón que no se puede quemar destruye la lógica Hotelling. Los países ricos en petróleo tendrán que rediseñar el contexto en el que producen y esto debilitará la influencia de los carteles. La lógica de producir ahora tanto como se pueda se hace más fuerte.

¿Qué pasa con las carboníferas, que futuro tienen?

En nuestro informe de los escenarios más recientes ya dijimos que el carbón enfrenta una gran incertidumbre, que no es la historia que las empresas realmente querían escuchar. No podríamos apoyar la lógica de que se necesita la industria del carbón para que los pobres tengan acceso a la energía. Esto ciertamente que no aplica para África Subsahariana, que tiene una agenda rural, no la centralizada que representa el carbón. Y decíamos que la CCS (captura y almacenamiento de carbono) no sería tan fácilmente acogida como muchos decían. Por lo tanto no es fácil pensar en un futuro próspero para el carbón. Las empresas necesitan ser realmente proactivas en CCS si desean creer en el futuro de su recurso. Si no logran tener una visión coherente a largo plazo para el desarrollo de la CCS, será difícil tomar cualquier acción para hacer algo de escala y que vaya más allá de un enfoque en un proyecto a la vez.

El Consejo Mundial de la Energía ha establecido un Centro Global del Gas para contribuir a un mejor entendimiento del gas en la mezcla energética. ¿Considera que el gas es un puente hacia el futuro? 

El gas continúa siendo una historia fuerte para el futuro próximo. Como sustituto para el carbón, pero también como puente en otras áreas, por ejemplo, en el transporte, o como medio de almacenamiento para energía renovable. Se presentarán muchas oportunidades para el gas. Es por eso que establecimos el Centro Global del Gas. Estamos convencidos que el gas tiene un rol fundamental que desempeñar.

¿Qué hay acerca de la eficiencia energética?

Como de costumbre no escuchamos mucho al respecto. Esta es un área que en realidad no ha llegado al nivel que esperábamos. Sí, estamos progresando. En los últimos 20 años, hemos obtenido logros del 1,3% en intensidad energética promedio por año. Durante la década antes del 2000 era 1,6%, después durante la primera década de 2000 fue 1%, entre 2010 y 2012 volvió a subir hasta 1,7%. Aun así, está muy por debajo de 2,6% que asumimos en nuestros escenarios y en el programa Energía Sostenible para Todos. Se debe realizar un esfuerzo mucho mayor. Creo que es un error decir que eficiencia energética es un fruto al alcance de todos. Requiere de un liderazgo complejo de todos los constituyentes y de todos los sectores, ya sea en transporte, despachos, vivienda, y así sucesivamente.

¿Piensa usted que últimamente el Cambio Climático se ha convertido en un tema de mayor relevancia en los países en desarrollo y en los países ricos en recursos que tradicionalmente han estado a la defensiva sobre este tema?

Un país como Arabia Saudita ha adoptado energía solar y eficiencia energética, porque saben que si no lo hacen, limitará sus oportunidades de exportación de petróleo. Esto desde luego que no lo motiva el Cambio Climático. Si nos fijamos en lo que pasa con el clima, el mayor cambio que puedo observar está en América Latina, que ha sido fuertemente impactada por eventos climatológicos, como sequías e inundaciones. También podemos observar que en partes de Asia y África, la gente está consciente de que los eventos improbables del ayer se han convertido en una realidad. Esto afecta su percepción del Cambio Climático. Pero el mayor cambio que pude observar está en los negocios. La gente ahora considera los renovables como un modelo de negocio en muchos más lugares que antes.

¿Cómo considera que las actividades del Consejo Mundial de la Energía evolucionan respecto al Cambio Climático?

Es importante comprender que después de Paris el mundo está ingresando a una transición triple. Primero la transición de la descarbonización. Segundo, tenemos lo que se podría llamar la transición de diseño de mercado: la necesidad de nuevas estructuras reguladoras e incentivos para adaptarse a las nuevas realidades causadas por la revolución de la energía renovable. Esto va mucho más allá que la electricidad, también afecta al gas, transporte y otros sectores. Y tercero, existe una transición en la capacidad de recuperación en el sector energético.

Es aquí donde estamos trabajando mucho con nuestro proyecto de Financiamiento de la Infraestructura Energética con Capacidad de Recuperación, donde observamos el impacto de eventos climatológicos extremos, amenazas a la ciberseguridad y el nexo energía-agua-alimentos en el sector energético. Esto implica una forma diferente de pensar acerca de la infraestructura y los sistemas críticos. Para navegar por estas transiciones con recursos limitados, uno debe definir claramente sus prioridades. De esto es exactamente de lo que se tratan nuestros escenarios, nuestro trabajo relacionado al Trilema Energético y sobre la capacidad de recuperación. ●

 

DE PERFIL

Christoph Frei, Secretario General del Consejo Mundial de Energía 

Nacido en Suiza, se convirtió en el Secretario General más joven del Consejo Mundial de la Energía en 2009. También es miembro del Consejo de la Agenda Global del Foro Económico Mundial sobre Seguridad Energética. Ha sido investigador y docente en temas energéticos en Institutos Técnicos Federales suizos en Zurich, Lausana y Würenlingen. Los trabajos y publicaciones del Dr. Frei han cubierto la seguridad energética, la pobreza energética y la innovación urbana. Impulsó la Alianza contra la Corrupción del Foro Económico Mundial, que en 2008 llevó para situarlo entre las 100 personas más influyentes en ética empresarial. Visitó Bolivia en 2014, invitado por la CBHE, en ocasión del Séptimo Congreso Internacional Bolivia Gas & Energía en cuyo evento fue conferencista magistral.