Fuente: JORNADA
La mayor parte del proyecto será financiada con un crédito de 1.800 millones concedido por el Banco Central de Bolivia (BCB) a la petrolera estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), que por su lado aportará los 400 millones de dólares restantes.
El presidente Evo Morales asistió este miércoles en Tarija a la firma del crédito entre el presidente del BCB, Marcelo Zabalaga; el de YPFB, Guillermo Achá; y el ministro de Hidrocarburos, Luis Sánchez. La planta, que producirá propileno y polipropileno, se construirá en el municipio de Yacuiba, en la región de Chaco, del departamento de Tarija, fronterizo con Argentina, donde se concentra más del 85 % de las reservas de gas natural de Bolivia. La licitación internacional para la construcción de la infraestructura será anunciada el próximo 1 de mayo, en honor al Día del Trabajador, según anticipó Morales.
La construcción de la planta comenzará en el segundo semestre del 2017, requerirá de 4.000 trabajadores y debe estar en marcha en 2021 para comenzar a producir 250.000 toneladas anuales de propileno. Un 20 % de la producción se destinará al mercado boliviano y un 80 % a Brasil, Argentina, Perú y China, según la proyección de YPFB.
Achá dijo que la industrialización del gas en Bolivia es una realidad y no se puede decir que "es un sueño, es una utopía", y destacó la importancia de que el proceso se lleve a cabo con recursos del Estado. Zabalaga, mientras, defendió que el Banco Central tiene recursos para financiar la planta y otros proyectos de industrialización debido a varias medidas tomadas por el Gobierno, una de ellas la nacionalización del sector petrolero en 2006 que produjo un crecimiento de las reservas monetarias del ente emisor.
La empresa japonesa Samsung construye en la región central de Bulo Bulo otra planta petroquímica para producir fertilizantes, con una inversión de unos 844 millones de dólares. La industrialización del gas natural y de los minerales es uno de los objetivos que Morales prometió al llegar a la Presidencia en 2006, pero no se ha logrado concretar efectivamente hasta ahora ni en el sector petrolero, ni en el minero, aunque hay proyectos en marcha. Dirigentes opositores han expresado varias veces sus dudas sobre la concreción de la industrialización con el argumento de que si no fue posible cuando los ingresos por la exportación del gas eran altos, menos ahora cuando han sufrido una significativa caída.
Los ingresos provenientes de la exportación de gas cayeron de 6.596,4 a 3.973,9 millones de dólares entre 2014 y 2015 debido a la baja del coste del petróleo, al que está indexado el del gas.
La mayor parte del proyecto será financiada con un crédito de 1.800 millones concedido por el Banco Central de Bolivia (BCB) a la petrolera estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), que por su lado aportará los 400 millones de dólares restantes.
El presidente Evo Morales asistió este miércoles en Tarija a la firma del crédito entre el presidente del BCB, Marcelo Zabalaga; el de YPFB, Guillermo Achá; y el ministro de Hidrocarburos, Luis Sánchez. La planta, que producirá propileno y polipropileno, se construirá en el municipio de Yacuiba, en la región de Chaco, del departamento de Tarija, fronterizo con Argentina, donde se concentra más del 85 % de las reservas de gas natural de Bolivia. La licitación internacional para la construcción de la infraestructura será anunciada el próximo 1 de mayo, en honor al Día del Trabajador, según anticipó Morales.
La construcción de la planta comenzará en el segundo semestre del 2017, requerirá de 4.000 trabajadores y debe estar en marcha en 2021 para comenzar a producir 250.000 toneladas anuales de propileno. Un 20 % de la producción se destinará al mercado boliviano y un 80 % a Brasil, Argentina, Perú y China, según la proyección de YPFB.
Achá dijo que la industrialización del gas en Bolivia es una realidad y no se puede decir que "es un sueño, es una utopía", y destacó la importancia de que el proceso se lleve a cabo con recursos del Estado. Zabalaga, mientras, defendió que el Banco Central tiene recursos para financiar la planta y otros proyectos de industrialización debido a varias medidas tomadas por el Gobierno, una de ellas la nacionalización del sector petrolero en 2006 que produjo un crecimiento de las reservas monetarias del ente emisor.
La empresa japonesa Samsung construye en la región central de Bulo Bulo otra planta petroquímica para producir fertilizantes, con una inversión de unos 844 millones de dólares. La industrialización del gas natural y de los minerales es uno de los objetivos que Morales prometió al llegar a la Presidencia en 2006, pero no se ha logrado concretar efectivamente hasta ahora ni en el sector petrolero, ni en el minero, aunque hay proyectos en marcha. Dirigentes opositores han expresado varias veces sus dudas sobre la concreción de la industrialización con el argumento de que si no fue posible cuando los ingresos por la exportación del gas eran altos, menos ahora cuando han sufrido una significativa caída.
Los ingresos provenientes de la exportación de gas cayeron de 6.596,4 a 3.973,9 millones de dólares entre 2014 y 2015 debido a la baja del coste del petróleo, al que está indexado el del gas.