El Banco Central de Bolivia (BCB) confirmó ayer el sólido desempeño de la economía nacional en 2015, al tiempo que estimó un crecimiento de alrededor del cinco por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) para este año.
Fuente: JORNADA

Prevé asimismo un ligero incremento de la inflación del tres por ciento actual a 5,3 por ciento, con lo cual ambos indicadores mantendrán a esta nación andina como la de mejores resultados macroeconómicos en Sudamérica. Así argumentó Marcelo Zabalaga, presidente del BCB, al presentar en esta capital el Informe de Política Monetaria (IPM) 2016. Durante su intervención, el directivo resaltó que el crecimiento económico boliviano fue de 4,8 por ciento del PIB el pasado año, el más sobresaliente de la región.

Ello se logró, dijo, en un contexto internacional caracterizado por la desaceleración de la mayoría de las economías y la caída de los precios internacionales de las materias primas, en especial de los hidrocarburos, con precios que declinaron de 100 a cerca de 20 dólares por barril.

También aludió a los menores flujos externos hacia las economías emergentes y en desarrollo, la depreciación de la mayoría de las monedas y el endurecimiento de las condiciones financieras internacionales. La decisión de sostener el dinamismo de la actividad económica nacional en el entorno descrito, incluso con una caída de los precios de los principales productos de exportación, afectó las cuentas externas y fiscales con déficit sin que ello haya presionado a incrementos adicionales en los precios, reconoció.

Zabagala destacó la política monetaria iniciada en el segundo semestre de 2014, la cual, en su opinión, apoyó las dinámicas económicas, incrementó la liquidez a niveles históricamente elevados y posibilitó una disminución de las tasas de interés monetarias y de intermediación financiera. Estos aspectos, remarcó, implicaron la expansión histórica más alta del crédito a hogares y empresas.

En este sentido, detalló que el 95,2 por ciento de los créditos y el 83,8 por ciento del ahorro bancario se encuentran en pesos bolivianos, lo cual evidencia la confianza en el estado de la economía y respalda la disponibilidad de capitales para nuevas inversiones. Como proyección para 2016, el presidente del BCB vaticinó un ambiente macroeconómico estable, una inflación baja y la ejecución de políticas para mitigar los choques adversos del ciclo económico y financiero internacional, con el fin de contribuir al desarrollo económico y social.

El IPM es la más importante publicación sobre políticas bancarias. Se elabora y divulga desde 2006 de forma semestral, y constituye un medio efectivo a través del cual la principal autoridad monetaria boliviana rinde cuentas sobre su desempeño. Este documento es presentado por autoridades del BCB a organizaciones sociales, gremios empresariales, profesionales, estudiantes y medios de comunicación.