×

Advertencia

JUser: :_load: No se puede cargar usuario con el ID: 975
El ministro de Economía y Finanzas, Luis Arce Catacora, aseveró que la economía del país tiene la suficiente musculatura para aguantar que el precio internacional del petróleo caiga hasta 10 dólares el barril.
Economía.- La autoridad sostuvo que Bolivia ya soportó más de 80 dólares de caída del precio del commodity, desde cuando éste cotizaba sobre los 100 dólares el barril. “Arrancamos esta gestión con 35 dólares (el barril) y en este momento está en 30 dólares, hay estudios que dicen que va a llegar a 20, incluso otros dicen que caerá hasta a 10 dólares, pongamos ese extremo (…) supongamos que cae a 10 dólares el barril; de 35 a 10 dólares, son 25 dólares de caída, si hemos aguantado 80 a 85 dólares de caída.

¿Estaremos en posibilidad de aguantar una caída de 20 a 25 dólares? Yo creo que sí”, manifestó el titular de Economía al programa “Esta casa no es hotel” de la red ATB. En los primeros 17 días de la presente gestión, el barril de petróleo WTI (West Texas Intermidiate o Texas Light Sweet), al que está indexado el gas boliviano de exportación, cayó en 20,5%; pasó de 37,04 a 29,42 dólares y continúa con tendencia a la baja.

Arce destacó que pese a la caída del precio del barril de petróleo en por lo menos 80 dólares –de $us 110 a $us 35-, “Bolivia creció cerca del 4,8% y no se ha sentido (el efecto) en la economía nacional en la gestión 2015”. “Las caídas podrían venirse, (pero) yo creo que la economía boliviana ha mostrado la suficiente musculatura para aguantar y resistir como ningún otro país en la región”, remarcó. Como parte de esa situación, dijo, hay problemas en las economías de Brasil, Argentina, Venezuela, Chile, Uruguay, Paraguay, entre otros, sin embargo “Bolivia muestra la menor tasa de inflación y el mayor crecimiento de la región”.

Analistas vaticinan que el país producirá a pérdida si el petróleo baja a $us 10 Si el precio internacional del petróleo continúa en picada y llega al extremo de $us 10 el barril, lo más probable es que Bolivia vaya a producir gas a pérdida, pues los costos de producción superarán los precios de venta, explicó el exministro de Minería e Hidrocarburos, Guillermo Torres.

“Tendría que hacer los cálculos, pero casi seguro que a 10 dólares vamos a estar perdiendo, es decir vamos a estar produciendo por debajo de los costos de producción, los precios van a ser más bajos que los costos de producción”, señaló el analista a la ANF. El precio del barril de petróleo WTI, de referencia para Bolivia, está por debajo de los $us 30, nivel no visto desde 2003.

El precio del crudo está indexado al precio de venta de gas boliviano a Brasil y Argentina. Torres, que fue ministro en el gobierno de Carlos Mesa (2003-2005), explicó que los actuales costos de producción de gas son superiores a los de antes. Por ejemplo, dijo, la perforación de un pozo en el campo San Alberto costaba en los años 90 alrededor de $us 20 millones, hoy en día está en el orden de los 70 a 100 millones.

En ese escenario, la renta petrolera bajaría a unos $us 600 millones anuales, de los alrededor de $us 5.500 que recibió el país en 2014. Ese ingreso sería equivalente al que obtuvo el país en 2005, antes de la llegada del presidente Evo Morales al poder. Torres recordó que cuando se firmó el contrato de compra y venta de gas con Brasil en 1996, el precio del barril de petróleo estaba en $us 20 y el precio base de negociación del millón de Unidad Térmica Británica (BTU) de gas era de 90 centavos de dólar, el cual, hasta el último tiempo, llegó a incrementarse hasta un poco más de $us 10. Tomando en cuenta esa referencia, el exministro anticipó que si el precio del barril de petróleo baja a $us 10 es probable que el millón de BTU reduzca hasta aproximadamente 50 centavos de dólar.

“Eso ya nos pone en una situación muy crítica porque los costos de producción del gas quedan ya mayores”, explicó. Para el experto en temas de energía, Álvaro Ríos, si el precio del petróleo baja a $us 10 el barril, el precio del millón de BTU estará en un dólar y esto impactaría en todo lo que son las nuevas inversiones en materia de hidrocarburos.