Fuente: Dinero

   

Esta iniciativa del Gobierno "promueve las visiones participativas del desarrollo humano sostenible en la regiones con actividad de la industria de hidrocarburos como instrumento para la construcción de la paz territorial".

 

Así lo explicaron los encargados de esta iniciativa en un evento realizado esta mañana en la sede de la ANH en el occidente de Bogotá, en el que además detallaron los cuatro objetivos principales para el plan en el 2016.

 

Promover la articulación de los actores que intervienen en el sector.

Fortalecer y generar capacidades en comunidades, gobiernos y empresas.

Prevenir y transformar las relaciones conflictivas.

Construir visiones conjuntas y sostenibles del desarrollo humano en los territorios.

El director encargado de la ANH, Orlando Velandia, manifestó que esta estrategia responde a la coyuntura actual y a la responsabilidad que tienen los distintos sectores de la economía de construir la paz.

 

En este sentido comentó que uno de los desafíos del sector, más allá de la caída de los precios de las materias primas, “es el alto nivel de conflictividad con las comunidades”.

 

Director encargado de la ANH, Orlando Velandia

 

Durante el evento, la ANH presentó algunos de los resultados de la estrategia que se desarrolló entre 2013—2015 en regiones como La Guajira, Córdoba, Sucre, Huila, Tolima, Putumayo, Caquetá, Meta, Casanare, Arauca, Magdalena Medio y Norte de Santander.

 

Gracias a la iniciativa, según la ANH, se han atendido alertas tempranas y vías de hecho en los territorios donde se concentra más del 85% de la producción  de hidrocarburos del país.

 

Adicionalmente, se ha evitado la “materialización de un mayor número de vías de hecho” o bloqueos de las zonas de explotación de hidrocarburos (el 83% de las alertas no escalonaron en protestas).

 

Dicho indicador es relevante en la medida en la que el país registró un ahorro de hasta $145.000 millones gracias a la prevención de unos 580 días de posibles bloqueos durante el año pasado.

 

Cifras del investigador Jorge Núñez, reveladas por la ANH, muestran que los municipios petroleros perdieron unos $271.000 millones a causa de la conflictividad social en el sector entre 2010 y 2014.

 

Además, se calcula que un aumento de la conflictividad social a una tasa del 1% en el país generaría una disminución en los ingresos totales per cápita municipales en un 0,06%. Se registraría una caída del 0,125% en la producción de petróleo, de acuerdo al informe "Costo de la conflictividad social en el sector de hidrocarburos" de Núñez.

 

Finalmente, la ANH argumentó que en la mayoría de los casos, las protestas no se producen con el objetivo de forzar la salida de la industria del territorio. Al contrario, las comunidades buscan que esta se  incorpore a sus modelos de desarrollo participativo.

 

Vale la pena destacar que en el marco de la estrategia territorial para la gestión equitativa y sostenible del sector de hidrocarburos se han destinado unos $2.400 millones (y apalancado otros $5.500) para atender las necesidades de 55 municipios.

 

Para la segunda fase de este proyecto sectorial se busca acompañar a los líderes sociales en la implementación de políticas públicas de empleo y generar indicadores que evidencien el aporte de dichos programas.

 

También se prevé contribuir a un mejor relacionamiento de los actores sociales, articular las fuentes de inversión social y consolidar esta estrategia como la principal fuente de información sobre asuntos de conflicto en el sector.