La maniobra generó pérdidas millonarias para la compañía. Hay personas detenidas.
Una investigación sobre contaminación ambiental en el sur de Buenos Aires develó el robo de una millonaria cantidad de petróleo de un oleoducto de YPF y desbarató una organización criminal. Lo extraían a través de un bypass, lo refinaban en destilerías clandestinas y lo vendían como combustible en estaciones de servicio y a productores agropecuarios. Los principales miembros de la banda, unas 18 personas, ya fueron detenidas.

Un informe publicado por el diario La Nación reveló que la organización, por medio de esta modalidad, robó unos 5 millones de pesos anuales en combustible. Señalaron que la diligencias comenzó ocho meses atrás, cuando se investigaba a una destilería clandestina de Valentín Alsina, del partido de Lanús, por contaminación.

Se concretaron 30 allanamientos distribuidos en cuatro provincias del todo el país, entre ellas Neuquén. En los procedimientos se detuvo a 18 miembros de la banda, entre ellos a quien sería el lider que armo la maniobra.

«Realizaban todo el circuito comercial, desde la extracción hasta el transporte y, en algunos casos, la destilación en una planta clandestina, que vertía los desechos en la cuenca Matanza-Riachuelo», informó la Fiscalía Federal N° 2 de Lomas de Zamora en un comunicado de prensa.

Entre los sospechosos se encuentran quienes se encargaban de hacer el pozo y realizar la pinchadura en el oleoducto para robar petróleo, según señaló el medio nacional. Además se detuvo los transportistas que trasladaban el combustible hasta las destilerías clandestinas.

El capitalista, que ideó el plan y acercó el dinero para comprar los camiones, los tanques y máquinas para procesar el crudo, fue el primero en ser atrapado. Según fuentes policiales contaron que el imputado fue arrestado ayer en la mañana, por los efectivos de la División Delitos Ambientales de la Policía Federal. Fue durante el allanamiento contra una destilería clandestina situada en Olavarría.

La investigación comenzó hace ocho meses, por un presunto caso de contaminación ambiental en una destilería clandestina de Valentín Alsina, partido de Lanús. «De a poco, se descubrió una asociación ilícita dedicada al robo de crudo», afirmó una fuente judicial.

El oleoducto de YPF profanado transporta crudo desde Bahía Blanca hasta la refinería que la compañía estatal tiene en La Plata. El medio nacional difundió que la empresa de mayoría estatal sería la principal afectada, aunque no se descarta que otra firmas de la industria petrolera hayan sido víctimas de las maniobras de la banda.

Ayer, 90 detectives de la PFA y personal de Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) participaron en los más de 30 allanamientos realizados en Pilar, González Catán (La Matanza), Olavarría, Bahía Blanca, Hurlingham, General Rodríguez y Ramallo, en la provincia de Buenos Aires, y en Neuquén, La Pampa y Santa Fe.

FUENTE: RÍO NEGRO - ARGENTINA