Ante los recientes acontecimientos de ataques, quemas y acciones vandálicas que se han suscitado en las últimas horas en nuestro país, que incluyen avasallamientos, invasiones, e ingresos indebidos de personas no autorizadas en instalaciones petroleras en diferentes puntos del país, nos permitimos alertar a la ciudadanía y a las fuerzas del orden y seguridad del Estado lo siguiente:
Las instalaciones petroleras ubicadas en diferentes zonas del país son un conjunto de activos que permiten el traslado, almacenaje y distribución de los hidrocarburos a nivel nacional. Esta infraestructura, al contener hidrocarburos líquidos y gaseosos solamente puede ser operada por personal autorizado y especializado.
La reciente irrupción de personas ajenas a las operaciones petroleras pone en grave peligro tanto a quienes ingresan, al personal que opera las mismas y a la comunidad de sus alrededores. Asimismo, cualquier hecho que amenace estas instalaciones podría poner en riesgo también el normal suministro de hidrocarburos para el país así como para los mercados externos.
La infraestructura petrolera boliviana es un patrimonio del país, consolidado durante muchas décadas que permite abastecer los mercados y aportar de manera significativa a la economía nacional.
En este sentido, exhortamos a las fuerzas del orden y seguridad del Estado, poner el mayor de los esfuerzos en resguardar estos activos que son de propiedad y utilidad pública, amparados en la Constitución Política del Estado.
Martes 12 de noviembre de 2019