El gremio añade que la reciente entrada de Petropar al mercado de comercialización de combustibles ha alterado el orden existente. 
Fuente: ABC
  
La Cámara Nacional de Comercio y Servicios de Paraguay (CNCSP) se suma al pedido de Dicapar y Apesa acerca de que Petropar debe definir su rol en el mercado de los combustibles: si será un regulador o un jugador. “Petropar como empresa pública nace en 1980. La misma surge con una naturaleza de agente regulador de un sector estratégico de la economía paraguaya, ya que los combustibles son un insumo vital para casi todos los sectores económicos, especialmente para la agricultura, la ganadería, el comercio y los servicios. La relevancia del sector es clave en Paraguay, ya que al no ser un país productor de petróleo, está obligado a importar”, comienza diciendo un análisis realizado por la CNCSP y difundido el fin de semana.
 
El gremio añade que la reciente entrada de Petropar al mercado de comercialización de combustibles ha alterado el orden existente. “Se presenta un conflicto de intereses debido a que la institución solo debía regular el sector, es decir, velar la provisión en términos de cantidad y calidad para asegurar la disponibilidad de carburantes en el país. Pero la apertura de nuevas estaciones de servicio en condiciones financieras poco claras ha afectado las inversiones del resto de los jugadores”, resalta el reporte, que también hace referencia a la deuda que arrastra Petropar con la petrolera venezolana PDVSA, de alrededor de US$ 300 millones; esta compañía había proveído combustibles en 2004 a nuestro país y desde entonces se arrastra el compromiso, cuyo pago se está definiendo en un arbitraje internacional.
 
Según explica el análisis de la CNCSP, el surgimiento y expansión de las estaciones de servicio de Petropar se produjeron en el periodo de precios bajos del petróleo (los últimos años). “Esta institución reguladora disponía de un pequeño margen para vender más barato que el resto de los jugadores. Esto hizo que logre posicionarse en el mercado de combustibles como actor dominante. Sin embargo, su rol debía haberse circunscripto a la regulación del sector y la fijación de precios referenciales que sirven de guía al resto de los participantes de la cadena: importadores y logística, transporte, distribución y comercialización”, resalta.
 
Para el gremio, la actual estructura económica paraguaya, sumada al conjunto de actores del renovado sector de combustibles, requiere de instituciones serias, consolidadas y eficientes que cumplan el rol de regular y asegurar el correcto funcionamiento del mercado. Y subraya: “La salida de los jugadores internacionales, que han puesto en venta sus activos, puede leerse también como la pérdida de credibilidad por la alteración de las reglas y sobre todo de los roles en el mercado de combustibles. Al cambiar las reglas de juego de un sector estratégico, el país pierde previsibilidad y credibilidad jurídica”. De este modo, la CNCSP se suma a las Distribuidoras de Combustibles del Paraguay (Dicapar) y la Asociación de Propietarios y Operadores de Estaciones de Servicios y Afines (Apesa), sobre definir el rol de Petropar.