Todos los actores del sector hidrocarburífero argentino están alineados para facilitar el aprovechamiento de los recursos no convencionales, según la visión de la consultora Paola Carvajal, quien augura un fuerte incremento de la producción en el corto plazo. 
Fuente: Petroquimica
  
La Argentina es, aparte de los Estados Unidos, el único país de las Américas que ha logrado avanzar en el sector de los hidrocarburos no convencionales. Así lo resalta Paola Carvajal, consultora de Estrategia y Operaciones en Arthur D. Little, para quien esta evolución fue posible gracias a la riqueza geológica de Vaca Muerta, las políticas del Estado y el interés de las compañías. Otro dato alentador, acota, estriba en el progresivo decrecimiento de las economías de perforación, que son un factor clave para el desarrollo del segmento. “Hablamos de un 50% de mayor eficiencia medida en dólares por metro cuadrado (m²) perforado. Si bien los costos aún no igualan a los registrados en las economías de algunos de los principales proyectos estadounidenses, en algunos casos ya están muy cerca de ellos”, puntualiza la especialista, quien acompañó al gobernador neuquino Omar Gutiérrez en su reciente presentación ante inversores en Houston (Estados Unidos).

Esto se refleja, a su entender, en un incremento marcado de la producción (que hoy llega a 120.000 barriles equivalentes por día) y de las inversiones exploratorias. “Debe destacarse, además, la presencia de los mayores actores internacionales (como Chevron, Shell y Exxon, que tienen en marcha proyectos muy ambiciosos) y los esfuerzos de firmas locales como la estatal YPF y Pan American Energy (PAE)”, añade Carvajal. De cara al futuro, proyecta, se vislumbra una continuidad del crecimiento. “Se espera que la oferta no convencional se más que duplique y supere los 250.000 barriles diarios para el año 2025”, cuantifica. En cuanto a los desafíos a sortear, asegura que el desarrollo de nueva infraestructura férrea y la optimización de la gestión logística permitirán a las empresas seguir ganando eficiencia.
 
“También hay retos vinculados con la demanda adicional de servicios e insumos petroleros (en taladros, por ejemplo, se requerirá cuadruplicar la actual oferta), el apoyo de las comunidades locales (si bien hasta ahora el país no ha registrado muchas dificultades en términos de protestas sociales), y la disponibilidad y calificación de los recursos humanos (serán necesarios 15.000 nuevos puestos de empleo por año)”, enumera.
 
Carvajal // “Si bien los costos de Vaca Muerta aún no igualan a los registrados en las economías de algunos de los principales proyectos estadounidenses, en algunos casos ya están muy cerca de ellos”
 
Ventaja comparativa
 
De acuerdo con Carvajal, el aprovechamiento a largo plazo de los recursos no convencionales de Vaca Muerta precisará, además de lo mencionado, que los precios sigan acercándose de una forma equilibrada a los valores del mercado internacional. “No menos importante será el desarrollo de una infraestructura urbana, de salud y de educación que permita sostener el crecimiento”, apunta.
 
Definitivamente, subraya, en la Argentina están alineados positivamente todos los actores de la actividad. “Ello posibilitó –casi tanto como la maravillosa roca generadora existente– que hoy en día el país aventaje por larga distancia a otras naciones interesadas por desarrollar yacimientos no convencionales”, compara. Más allá de que el panorama luce promisorio, cree que no deben descuidarse los múltiples retos a resolver. “No pueden perderse de vista las diversas necesidades de inversión a solventar”, recalca.
 
Condiciones aptas
 
Carvajal piensa que con el Gobierno de Mauricio Macri aumentó la confianza de las compañías a la hora de invertir en la Argentina. “Pero no podemos pensar que la industria no tiene memoria. Todavía está muy presente la expropiación de YPF a Repsol”, recuerda la consultora. Hay mucha inversión comprometida, expone, para llevar a cabo proyectos que se ejecutarán durante los próximos 35 años. “En este momento están las condiciones dadas para crecer en el sector. La industria le está creyendo al país. Pero a largo plazo pueden presentarse muchos cambios de autoridades a nivel nacional que resulten desfavorables, lo cual inevitablemente despierta algunos temores”, advierte.
 
Consultada sobre la cuestión ambiental, celebra la suerte de que el negocio no convencional tenga lugar sobre un área tradicionalmente petrolera. “Eso facilita el conocimiento de los beneficios de esta industria entre las comunidades”, concluye.